Pedro J. Brissón(*) / Artículo de opinión.-La visita del presidente del estado español, Mariano Rajoy, está prevista hoy martes en México y el jueves 19 visitará a Colombia, se reunirá con los máximos dirigentes de ambos países y según fuentes oficiales; “para respaldar las inversiones de las empresas españolas en la región”. Además, intentará dividir la opinión y el respaldo a las políticas útiles para el desarrollo económico de Argentina, valiente y necesaria iniciativa soberana de la Señora Presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Los medios coloniales españoles dicen que es un acto de patrioterismo de Argentina, pero sólo ven la paja en el ojo ajeno, cuando ellos son capaces de respaldar a una empresa privada ondeando la bandera de amenaza contra España, ¿esto no es patrioterismo españolista rancio?, ¿por qué no reconocen, hipócritas, que todo esto es una cuestión de plata?
También sabemos que Amnistía Internacional le ha pedido que les dé un tirón de orejas a ambos mandatarios, para que cumplan con los compromisos internacionales de derechos humanos, aunque a principios de este año; casi un centenar de organizaciones le han pedio a Rajoy un II plan de Derechos Humanos en España, ¿por qué será? En el caso específico de Colombia se le pide al presidente español “que condene públicamente los abusos cometidos por todos los actores armados en el conflicto y que los crímenes perpetrados por las Fuerzas Armadas contra el Derecho Internacional estén al margen de la justicia militar”. y mi pregunta es la siguiente: ¿Quién le da la potestad de vocero en defensa de los derechos humanos?
Debo recordar a los líderes de estos países latinoamericanos que Mariano Rajoy antes de ser presidente fue el portavoz del gobierno de José María Aznar (ambos del Partido Popular), ocupando también la cartera del ministerio de la presidencia. Estos señores apoyaron una guerra contra Irak, comandada por George Bush e iniciada en 2003. Miles de personas civiles han muerto en una guerra justificada por armas de destrucción masiva, que debían tener los iraquíes y que nunca fueron encontradas. Los derechos humanos en este contexto saltaron por los aires, ya que la guerra fue la excusa para expoliar el país árabe. Según los derechos humanos todas estas victimas muertas e inocentes deberían obtener justicia, o sea, los criminales que mandaron esas fuerzas de ocupación deben ser juzgados por crímenes a la humanidad.
¿Creen realmente que Rajoy es el vocero adecuado para defender que se cumplan los derechos humanos en Latinoamérica? ¿España debe considerarse país civilizado y demócrata cuando mantiene el dominio de colonias, como es el caso de las Islas Canarias? Él, y otros depredadores como él, son los que tienen las manos manchadas de sangre de miles de inocentes, todo en nombre del expolio del oro negro o de contratos exclusivos para reconstruir Irak: “para respaldar las inversiones de las empresas españolas en la región”.
Nuestra memoria debe seguir viva y recordar como estos señores, Aznar y Rajoy; se involucraron en el intento fallido de golpe de estado al presidente de Venezuela Hugo Chávez -reconocido por el mismo Chávez en la cumbre Iberoamericana de 2007-, dando además el rey Borbón (el asesino de osos y elefantes en peligro de extinción), una imagen anacrónica medieval, de soberbia, falta de respeto, e incapacidad diplomática, ya que no sólo mandó a callar a un mandatario elegido por el pueblo, sino que además se levantó yéndose de la sala, siendo este hecho algo impensable para un diplomático. De esta manera, el expresidente Aznar y hoy presidente Rajoy, han demostrando lo demócratas que son –mejor dicho que no son- interfiriendo en la soberanía de otra nación. Y todo: “para respaldar las inversiones de las empresas españolas en la región”.
Curiosamente, todos estos hechos favorecieron a Aznar para que se le concedieran más de doce títulos Honoris Causa. Ahora es el turno de poder para Mariano Rajoy y para vergüenza ajena se le concederá - en Bogotá- el título Honoris Causa en Derecho por la Universidad Sergio Arboleda. Y recibe este premio quién vuelve a endurecer la políticas migratorias que desfavorecen sobre todo el derecho a los latinoamericanos, el mismo personaje que no cumple la Declaración Universal de los Derechos Humanos del 10/12/48 y que en su artículo 13 dice: “Que toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un estado”. eso sí, el gobierno español blinda las fronteras de inmigrantes, justificándola a su electorado ultraespañolista; argumentando que es por el bien de España y siempre “para respaldar las inversiones de las empresas españolas en la región”.
* Pedro J. Brissón - Presidente de la asociación sociocultural Faita
Buenaventura – Colombia a día 18 de abril de 2012
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