Salvador López Arnal * / Artículo de opinión.- [Elisabeth de Baviera, la Emperatriz de Austria-Hungría] aumentaba constantemente su fortuna particular. Adquirió acciones de los ferrocarriles y de la empresa naviera austriaca. Tenía distintas cuentas, todas bajo nombres falsos.
Isabel Alba (2011), La verdadera historia de Matías Bran
Las leyes y el gobierno pueden ser considerados…, en todos los casos, como una coalición de los ricos para oprimir a los pobres y mantener en su provecho la desigualdad de bienes que, de otra forma, no tardaría en ser destruida por los ataques de los pobres.
Adam Smith [1]
“Todo lo sólido se desvanecen el aire”, señalaron los jóvenes revolucionarios Marx y Engels. No se libran de ello las estrategias monárquicas para separarse del núcleo duro de la imponente trama Urdangarin-Borbón-Torres [UBT], una nueva estrategia de la araña.
La Zarzuela tuvo que reconocer finalmente el pasado 17 de diciembre de 2011 que tuvo conocimiento de los comportamientos “no ejemplares” -“inadecuados” según sus propias palabras- del yernísimo en 2006. Fue, sin embargo, el 12 de diciembre del pasado año cuando se decidió apartar de la agenda oficial al Duque palmesano, el mismo que ingresó 300 mil euros por asesoramiento verbal al empresario Domingo Díaz de Mera, el promotor del fallido aeropuerto de Ciudad Real. Fuera, pues, de la agenda institucional borbónica pero ¡más de cinco años después!
Hasta el momento, la estrategia seguida por la Casa Real ha ido trazando los siguientes contrafuegos: alejamiento y ubicación de la pareja Urdangarin-Infanta en Washington, previo acuerdo con César Alierta, el presidente de Telefónica; abandono (aparente inicialmente) de la presidencia del Instituto Nóos por parte del yernísimo; construcción de una singular e imposible línea de demarcación Infanta versus Urdangarin (aunque, por ejemplo, en 2005, el aristócrata ha declarado que por Aizoon, la empresa de la familia UB, facturó al Instituto Nóos 550.000 euros); desconexión, fuerte y publicitariamente aireada, del Duque y el Rey, sumado todo ello al paso del tiempo, el olvido ciudadano y la infame y servil inculcación mediática (medios de comunicación públicos no excluidos).
El diseño de la estrategia, no forzosamente en solitario, tiene probable autoría en José Manuel Romero, conde de Fontao, miembro del consejo del Patrimonio Nacional y asesor Real, aunque, como es sabido, ha habido algún desmentido del Duque palmesano de anteriores aseveraciones del conde.
La visita de la Reina Sofía a su hija y yerno en Washington el pasado diciembre, incluida la foto negociada en “Hola”, es indicio de las disidencias controladas que se han generado en los interiores de la Familia Real. La Reina, normalmente aconsejada por fieles agentes del Opus Dei, parece apostar abiertamente por “la inocencia” del duque y su hija. ¿En qué inocencia pensará la Reina consorte y separada?
El conde Fontao aprobó ceder los fondos, unos 30.000 euros, de otra ONG de la trama UBT, la fundación Areté, a una fundación, DCIS (Deporte, Cultura e Integración Social), también del entramado, que desvió fondos públicos a cuentas opacas vinculadas a Belice, un conocido “paraíso fiscal”. El conde declarará como testigo en el caso; la fecha no está fijada pero la decisión es firme. El asesor Real deberá comparecer para explicar sus gestiones ante Urdangarin y las circunstancias en que se desarrollaron. Tiene mucho que explicar sin duda y no es imposible que asomen nuevas contradicciones, a pesar de preparadores, portavoces y consejos de abogados sin escrúpulos.
¿Qué cosas puede aclarar el asesor Real? Cosas como las siguientes por ejemplo: ¿por qué a pesar de las supuestas indicaciones y órdenes Reales los negocios del yernísimo y familia en España siguieron realizándose, usando la embajada española como sala de operaciones tal como si se tratara de su imponente salón de invitados de su palacete de Pedralbes, durante su estancia en Washington hasta 2009? ¿Nadie sabía en el Palacio de la realeza que el desaguisado no había finiquitado y que seguía in crescendo? ¿Fue la dimisión formal del yernísimo del instituto Nóos una dimisión real o falso y calculado teatro? ¿No fue el propio duque palmesano quien, en 2007, un año después de su dimisión, reclamó al gobierno balear las cantidades “adeudadas” al Instituto?
Las preguntas se irán acumulando, no hay que pasar pena. Lo explicado hasta el momento no tiene apenas consistencia. Basta escarbar un poco, no conseguirán cegar a la opinión pública. La “burbuja” UBT, no siempre desconectada de las otras -de la infamia inmobiliaria y del desfalco y asalto privados a las finanzas públicas-, ha estallado, tiene su propia y prolongada historia y es imposible que en su entorno próximo -o en él un poco más alejado, incluyendo en éste la reconocida escuela de negocios ESADE y las curiosas tesis doctorales que en ella se presentan- nadie supiera nada y el viento siguiera agitando su acumulación monetaria sin que nadie oyera ruido alguno. El resto no pudo ser silencio, no puede reinar paz ni sosiego cuando el instituto Nóos consiguió tres millones de euros en tres días y sin concurso de la administración pública valenciana.
José Luis Centella registró el lunes 9 de enero de 2012 una pregunta en la Cámara sobre los fondos destinados a la “Corona”, por cualquier concepto y desde cualquier Ministerio, así como la cuantía dedicada al mantenimiento de edificios y al paso de retribuciones del personal adscrito a la Casa Real. ¡Más de 30 años después, seguimos como estábamos, como en los viejos tiempos! El silencio borbónico y el gubernamental han sido hasta ahora la respuesta, el logo de la casa. No podemos seguir así.
Además de las preguntas e intervenciones institucionales, sin excluirlas desde luego, la ciudadanía democrática debe empujar con todas sus fuerzas, ahora más que nunca, para superar y arrinconar esta segunda restauración monárquica. Hay que impedir sea como sea que, como ocurriera aquel aciago 23-F de 1981, la institución, probablemente implicada hasta las cejas, salga feliz, triunfadora y limpia de este nuevo, aléfico y corrupto entramado. Basta recordar, por si fuera necesario, que Carlos García Revenga, secretario de las infantas Elena y Cristina sin que haya dejado de serlo hasta el momento, fue tesorero del Instituto Nóos durante la presidencia del Duque de Palma. Dimitió como secretario en la reunión del patronato celebrada el 20 de marzo de 2006. ¿No supo durante su permanencia en lugar tan relevante de las curiosas operaciones mercantiles de la ONG? ¿Un tesorero que ignora el sentido de las cuentas de la institución en la que trabaja? ¿UN cargo meramente simbólico, de pura confianza, sin poder dispositivo, como ha declarado el gran Duque? ¿Todo un secretario de las hijas del Rey que frente a una trama de esas características nada dice a otros asesores reales acaso más próximos para dar cuenta de la estafa y vaciamiento de las arcas públicas que se estaba perpetrando antes sus ojos? ¿No llegó a saber que Nóos intentó endosar, esta vez sin éxito, a la Generalitat valenciana 12.600 euros de un trabajo privado?
La actuación del duque en la embajada de Washington hace pensar que Urdangarin siguió pensando, con razón probablemente, que gozaba de todo el apoyo de la primera autoridad del Estado. Si no fuera así, es casi impensable que obrara al modo que lo hizo, hasta el punto de levantar quejas del mismísimo embajador español.
PS: Recuerdo finalmente algunas consideraciones de un artículo publicado en LibreRed: “La Audiencia Nacional no investigará la gran trama de corrupción de la monarquía española” [2]. La investigación sobre la trama de corrupción en la que está involucrada la Monarquía española ha revelado como los socios del yerno del Rey se comunicaban e interactuaban para evadir impuestos endosando gastos personales a la empresa de Iñaki Urdangarín y Cristina de Borbón, Aizoon. Un conjunto de correos electrónicos muestran los movimientos de capital que Urdangarín realizó en 2008. Se ha filtrado que el Rey Juan Carlos ya tenía conocimiento de la trama desde el año 2006 pero no dijo nada, lo que en derecho es considerado como un delito por encubrimiento.
Las conversaciones vía e-mail implican directamente a la infanta Cristina. El 1 de septiembre del año 2009, le responden: “SAR me ha encargado compras que no puedo justificar por gastos de Aizoon“, refiriéndose a Su Alteza Real la infanta Cristina. “Le doy los tickets a Marco, para que él me devuelva el dinero de la caja. ¿Ok?” A lo que Urdangarín le responde “Ok. Se lo gasta en algún regalo para mí no?”. Gran parte de todos esos correos remiten a la actividad de Aizoon, la empresa inmobiliaria en la que figuraba la infanta Cristina y de la que dice ser una figura decorativa.
Pese a que la Casa Real española tenía conocimiento sobre el tema, Aizoon SL siguió haciendo negocios después de 2006. Fue ese año cuando la compañía U+C comenzó su relación con Mixta África SA, una inmobiliaria con sede en Barcelona que construye viviendas de lujo en el continente africano y en cuyo accionariado tienen un peso significativo miembros de la familia real saudí. Entre 2006 y 2009, Aizoon SL percibió 445.440 euros de Mixta África por asesoramientos inmobiliarios. Además de cobrarle por sus “servicios”, Aizoon adquirió en 2007 acciones de Mixta África por 150.001 euros (así lo ratifica el informe de Hacienda). Además de los procedentes de esa inmobiliaria, Aizoon recibió –después de 2006- pagos anuales por importe global superior a medio millón. Pagó Motorpress Ibérica SA, a cuyo consejo perteneció Urdangarin hasta septiembre de 2009.
En 2009, Aizoon facturó, además de a Mixta África (55.680) y a Motorpress (101.500), a otras siete compañías que le reportaron ingresos totales por 146.160 euros. Uno de esos cobros (34.800 euros) tenía su origen en la elaboración de un informe para una empresa valenciana sobre la opción de organizar una gran fiesta multicultural.
La estudiada declaración del yernísimo el pasado fin de semana indica claramente que las dimensiones de la trama y sus numerosas ramificaciones están lejos de ser conocidas en su totalidad.
Notas:
[1] Tomado de Federico Aguilera Klink, “Leyendo a Adam Smith para entender la situación actual” http://www.rebelion.org/noticia.php?id=145466
[2] http://www.librered.net/?p=15001
Salvador López Arnal
Salvador López Arnal es colaborador de rebelión y El Viejo Topo y discípulo de Francisco Fernández Buey, es coautor, junto a Eduard Rodríguez Farré, de Casi todo lo que usted desea saber sobre los efectos de la energía nuclear en la salud y el medio ambiente. Los libros de El Viejo Topo, Mataró (Barcelona), 2008.
* Profesor-tutor de Matemáticas en la UNED y enseñante de informática de ciclos formativos en el IES Puig Castellar de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona). Colabora normalmente en la revista "El Viejo Topo" y es coguionista y coeditor, junto con Joan Benach y Xavier Juncosa, de "Integral Sacristán" (El Viejo Topo, Barcelona, en prensa).
Salvador López Arnal es autor de Entre clásicos (La Oveja Roja, Madrid, en prensa).
Canarias Insurgente ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.
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