Francisco González Tejera * / Artículo de opinión.- Los derechos se toman, no se piden; se arrancan, no se mendigan.
Como una plañidera el antiguo jerarca europeo del PSOE Manuel Marín repetía en una entrevista en TVE sus jaculatorias del “no hay salida”, “no hay alternativas posibles”, “no hay soluciones a la crisis si la ciudadanía no hace un enorme esfuerzo para combatirla apretándose el cinturón”. Este impresentable europeista que lleva décadas viviendo del bote de la política y viajando en clase bussiness, no tiene escrúpulos para con cara de llorón compungido pedirnos que entendamos los recortes de la esperpéntica Unión Europea, la vergonzosa forma de hacer política de todos los neoliberales, que se meten en política para defender los intereses de aquellos que les pagan sus caprichos desde la banca y las grandes corporaciones.
El rostro desencajado de este patriarca de la sinrazon se me quedó grabado después de la comida y me revolvió las tripas, con verdadero asco compruebo las pocas diferencias en el discurso político de estos "democratas" de cuello alto, que nos venden la crisis capitalista como un problema que debemos solucionar desde la clase trabajadora, con los recortes y reformas inevitables, con los deberes bien hechos ante la fascista Merkel y su bufón Sarcozy, rindiendo pleitesía al nuevo Reich económico impuesto por los que matan de hambre cada día a millones de seres humanos.
Detrás de las políticas de estos enchaquetados están siempre presentes las garras del imperialismo norteamericano, políticos creados en los laboratorios de la banca para generar un nuevo ejercito de esclavos y esclavas. Millones de trabajadores y trabajadoras en manos de estos siniestros personajes con unos medios de manipulación masivos a su servicio, manipulando, engañando, saqueando y destruyendo la naturaleza, mientras algunos que salen mucho en la tele se lucran y llenan sus cuentas corrientes de millones de euros y dolares pisoteando los derechos y la dignidad de los pueblos.
Yo sinceramente ya no me creo nada o casi nada de los informativos del sistema, siento una enorme preocupación por el futuro de mis hijas, por los millones de niños y niñas que contemplan estupefactos la inmensa barbarie de las guerras imperiales, la miseria humana de esta crisis inventada para imponer un nuevo “talón de hierro” casi infranqueable, sustentado por los votos de la ignorancia de quienes siguen creyendo en esta democracia secuestrada por las grandes fortunas, por seres sin escrúpulos que son capaces de asesinar y arrasar el planeta, para mantener su establishment construido sobre la sangre, la miseria y el sufrimiento de la inmensa mayoría de la humanidad.
Francisco González Tejera
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