Canarias Insurgente: Ni sus muertos son nuestros muertos ni nuestros muertos son los suyos, eso está claro.

Ni sus muertos son nuestros muertos ni nuestros muertos son los suyos / Foro Ciudadano contra la Incineración Tenerife.- Yo no sé, si les digo la verdad, por qué me ha sentado tan mal el 'detallito' de Milagro Luis Brito de impedir que se suspendieran las clases en un instituto de Las Palmas para honrar a un compañero profesor que murió en la puerta de un aula cuando se disponía a dar clase. No tiene mucho sentido, verdaderamente, con la de cafradas a las que nos tienen acostumbrados esta chusma que nos gobierna incluso en la más absoluta de las minorías, democráticamente hablando. Pero este es el sistema electoral podrido y antidemocrático que nos ha tocado padecer y que nos está llevando, entre otras cosas, a la más absoluta de las miserias no sólo económica sino incluso moral, visto lo visto.

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Y claro que me ha venido a la mente, ante este hecho deplorable, cómo estos personajillos programaron el entierro de Adán Martín, ese padre de la patria que también renunció a la sanidad canaria para acudir a la catalana (que se lo veo bien porque aquí muchas veces los cuidados paliativos son en los fríos pasillos de los hospitales, con suerte), nada menos que un lunes por la mañana, lo que supuso que ni el Gobierno de 'canallas' en pleno, ni el Parlamento, ni el Cabildo de Tenerife, ni el Ayuntamiento de Santa Cruz y todos lo áticos de Tenerife -o al menos todos los que disfrutan de bien remunerados cargos públicos, que son la mayoría- acudiesen ese día al trabajo porque estaban paseando sus palmitos detrás del muerto por las calles de Santa Cruz que fueron convenientemente cerradas al tráfico y, para joder más al personal, al tiempo que desde el día anterior ya se advertía de la prohibición de aparcar en ese entorno, que para sus cosas sí que son previsores estos tipos/as.

Y claro que ante las imágenes que retransmitió durante varios días la 'Atinómica' de las exequias me resultó especialmente esclarecedor el ver cómo quizás sólo unas decenas de curiosos -además de los del coche oficial, la banda de música y el escuadrón de la guanchancha- se dieron cita en las inmediaciones del edificio de Presidencia de Gobierno (cuyo diseño Adán encargó a su hermano porque si por algo pasará a la historia este individuo es por su descarado nepotismo) para ver el desfile fúnebre pese a las parafernalias y las bandas de música. Porque es que eso no sólo viene a demostrar que acaso tenga razón la Luis Brito al discriminar de esta manera a nuestros muertos con respecto a los de ellos, porque nadie se siente identificado con esta chusma ya, sino que fíjense ustedes por donde el presidente que pagó con nuestro dinero a una avioneta de Grafcan para que con imágenes manipuladas (nunca pudimos ver el reportaje completo) descalificase la asistencia a una de las manifestaciones contra el Puerto de Granadilla, haciendo públicas unas cuantas fotos de cuando el acto ya había concluido justo en las inmediaciones de Presidencia de Gobierno. Hay que ver, nos mandó una avioneta a nosotros para demostrar que nadie apoyaba esta digna ducha por proteger lo más valioso que tenemos (hasta 56.000 firmas se pasó este mismo por el arco del triunfo en el Parlamento) y resulta que absolutamente nadie acudió a mostrarle sus respectos al que presidiera nada menos que el Cabildo y este Gobierno de 'Canallas'.

Que no es que uno se alegre o se deje de alegrar de nada de esto. De lo que estamos hablando es de que si así respeta esta chusma a nuestros muertos me dirán ustedes de la obligación que tenemos nosotros, o el resto, de respetar estas parafernalias que montan ellos cuando cae uno de los suyos sin haber tenido que padecer ni listas de espera, ni camillas en los pasillos ni nada de eso. Yo se los diré: Ninguna.

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