Tomaduras de pelo / inSurGente.- El ministro de Industria dijo que el incremento equivale, por persona, a poco más de un euro al mes. Aparte de la supuesta gracia del comentario, miente. La subida de la luz no se queda ahí, durante el 2011 habrá más. Miguel seguirá riendo, quizás hasta que vea el resultado de las urnas. La subida de la luz en casi un diez por ciento a partir del próximo 1 de enero es motivo de preocupación para el conjunto de los consumidores, pero el ministro de Industria, Miguel Sebastián, intentó ayer minimizar su impacto asegurando que sólo supondrá un gasto mensual adicional de "poco más que el precio de un café".
Se tomen o no esa taza de café los ciudadanos, lo cierto es que el nuevo año llega, como siempre, acompañado de subidas generalizadas en el transporte o la alimentación. Incrementos superiores al IPC y a la mayoría de las mejoras, para el que las tenga, salariales. El panorama no es nada halagüeño para el conjunto de la sociedad y el ministro jugó a intentar maquillar con las matemáticas la mayor subida de la historia en el recibo de la luz añadiendo más tensión si cabe.
Había relativa expectación en torno a las explicaciones de Sebastián. Su silencio el lunes, el día en el que se aprobó definitivamente la nueva tarifa, había sido muy comentado. El secretario de Estado de Energía, Pedro Luis Martín, fue el encargado de comparecer ante los medios a pesar de que la comisión que fijó la subida está presidida por la vicepresidenta económica, Elena Salgado. Sebastián salió ayer de las sombras oficialmente para aclarar las dudas de una subida que necesita pocas explicaciones técnicas y demasiadas políticas.
El objetivo era convencer a la opinión pública de que el asunto no será tan gravoso para las familias. Y se centró en las matemáticas para ilustrar esa teoría. Según los cálculos del Ministerio, la subida será de 3,5 euros al mes. Esa cantidad dividida entre dos -la mayoría de los hogares tienen más de un miembro- supone que el incremento mensual rondará los 1,7 euros, poco más que un café, aseguró Sebastián.
El problema es que las medias de consumo se ajustan relativamente a la realidad y las de consumo eléctrico todavía más. La luz se consume tanto en pisos de cuarenta metros como en los de doscientos o en las casas unifamiliares. Tampoco es lo mismo el consumo de un hogar con calefacción eléctrica que de otro con gas natural.
los cálculos de facua De hecho, Facua, Consumidores en Acción, ha hecho sus propios cálculos del impacto de la subida con los consumos de más de 25.200 hogares. Según indicó ayer en una nota de prensa, la factura se encarecerá en 6,77 euros cada mes, más de 80 euros al año, el doble de la cifra que maneja el Gobierno Zapatero.
Pese a desdeñar la subida de enero, el ministro dijo que el Gobierno no ha tendido más remedio que encarecer la luz "por necesidad y responsabilidad" al tiempo que trabaja para no tener que aplicar ningún aumento más en 2011. No está en sus manos, aclaró, todo dependerá de los mercados energéticos internacionales.
En su comparecencia, Sebastián repasó todas las medidas activadas por el Ejecutivo para reducir los costes del sistema eléctrico, que, aunque no han evitado el repunte ni minimizado el impacto en los bolsillos de los ciudadanos, son exhibidos constantemente para ilustrar el desvelo del gabinete en la materia.
En marzo se revisará de nuevo la tarifa y Sebastián mostró su confianza en que no haya grandes variaciones. Todo dependerá de las presiones del sector, que considera que es necesaria una reforma del sistema eléctrico, partiendo del método de cálculo, y también de la contestación social.
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