Pedro Brenes* / Artículo de opinión.- Quizá lo más reseñable de este segundo año de existencia de nuestro Partido, ha sido la elaboración y la puesta en práctica de la política de alianzas basada en los principios de unificación comunista y reagrupamiento de la izquierda anticapitalista. Principios sintetizados en nuestra consigna de “La Unidad es la Revolución“.
Cuando se cumplen dos años desde la fundación, en Septiembre de 2008, del PRCC, es indudable que la nueva política unitaria promovida, sobre todo, a partir de la publicación, en Octubre pasado, del artículo “Reagrupar las fuerzas de la izquierda” se ha ido extendiendo y ganando adeptos progresivamente, hasta convertirse hoy en la tendencia dominante y mayoritaria entre los hombres y mujeres que trabajan desde los partidos, los sindicatos y los movimientos sociales de la izquierda, por la superación del régimen explotador capitalista y de la opresión imperialista.
Sin embargo, como suele ocurrir con la aparición de nuevas ideas que rechazan los estereotipos y las rutinas para avanzar y responder a nuevos tiempos y nuevas condiciones de lucha, no faltaron los escépticos, ni los incrédulos, ni los indiferentes.
La primera batalla que hubo que librar para definir y delimitar ideológicamente el campo de la izquierda anticapitalista, se desarrolló en contra de la campaña del fascio-cubillismo insularista reaccionario, que pretendía, con sus “gloriosas” manifestaciones en demanda de la intervención de la ONU, arrastrar a los compañeros de la izquierda nacionalista (socialistas revolucionarios, sindicalistas, anarquistas y ecologistas) a una alianza basada en la supuesta “unidad de todos los patriotas” y al grito fascista de “¡Nada de lucha de clases!”.
Al desenmascarar y denunciar la maniobra insularista de “La Santa Alianza de ATI-El Día-Cubillo-Concepción” se logró el primer objetivo: aislar al fascismo independentista y frustrar y llevar al fracaso su empeño de conseguir aliados en el juego de la burguesía canaria, dependiente y chantajista, para la recomposición del Pacto Colonial Histórico con el imperialismo español.
Y, al mismo tiempo, salvar el honor de los diversos grupos de independentistas de izquierda que, después de un primer momento de desconcierto, supieron romper definitivamente los lazos con los lacayos del capitalismo y del imperialismo que intentan disfrazarse, en su despreciable y ridículo carnaval antipopular y anticomunista, de “Movimiento de Liberación Nacional”.
Libres del estigma cubillista, se abrió la posibilidad de contactar con los partidos, sindicatos y movimientos sociales que conforman la izquierda anticapitalista del Archipiélago y, fruto de esos contactos, se alcanzó el acuerdo de unidad de acción de los tres partidos comunistas de Canarias que, por primera vez, aparecieron unidos en la celebración del Primero de Mayo en Las Palmas.
También como consecuencia de la política unitaria, que se ha convertido en la corriente principal en el seno de la izquierda canaria, junto al Bloque Comunista han ido surgiendo otras iniciativas hacia la Unidad, como la propuesta de los partidos, sindicatos y asociaciones independentistas, que han lanzado la idea de organizar Comités Populares como órganos de la Resistencia frente a los recortes y los ajustes contra los derechos y los intereses de los trabajadores.
Y ahora, en el periodo de preparación de la Huelga General del 29 de Septiembre, cobra enorme importancia y significación la Plataforma Unitaria Sindical de Canarias que reúne a los grandes sindicatos UGT, Comisiones e Intersindical, junto a casi todos los colectivos, sectoriales o de empresa, que respaldan la unidad sindical contra los designios del gobierno de los banqueros y los monopolios, sometido a los dictados antiobreros y antipopulares del Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional.
Todos estos acontecimientos, vistos en su conjunto, demuestran que la tendencia hacia la reagrupación de fuerzas y la creación de una alternativa unitaria de la izquierda anticapitalista para organizar y dirigir la Resistencia Popular contra la crisis, el paro, las reformas contra los derechos de los trabajadores y los recortes en las prestaciones sociales, los salarios y las pensiones, se ha consolidado definitivamente y se ha vuelto irreversible, en la medida en que la gran mayoría de los luchadores del pueblo han tomado conciencia de que la Unidad es el único camino y la única forma de enfrentarnos con posibilidades de éxito a la ofensiva de la patronal y los bancos.
Sin embargo, todavía persiste una minoría que se niega a admitir la necesidad, ante las nuevas circunstancias históricas, de abandonar los viejos hábitos y los métodos desfasados.
Algunos pretenden mantener, contra viento y marea, los reflejos del electoralismo vulgar y del más rancio sectarismo. Llegando, en algún caso, al extremo de pretender que los trabajadores sobre los que tienen influencia hagan de esquiroles en la Huelga General del 29 de Septiembre, pasándose, consciente o inconscientemente, con armas y bagajes al enemigo de clase y apoyando la política de la burguesía capitalista y la oligarquía financiera.
Pero estamos seguros que, como hemos hecho la mayoría de los partidos y sindicatos de la izquierda canaria, estos compañeros desorientados analizarán las nuevas condiciones, reflexionarán con seriedad y responsabilidad y llegarán obligatoriamente a la conclusión de que ya se acabaron los tiempos de los pequeños proyectos electoralistas y sectarios, que no tienen la menor posibilidad de éxito frente a los poderosos aparatos de los partidos de la derecha.
Y comprenderán que sólo la alianza de todos los grupos de la izquierda anticapitalista en un Frente de Resistencia Popular unitario, democrático y asambleario, dotado de un Programa Político antimonopolista y antiimperialista, puede levantar una alternativa revolucionaria capaz de enfrentarse al bloque de la derecha representado por el PP, el PSOE, CC y NC.
(*) Pedro Brenes es Secretario General del Partido Revolucionario de los Comunistas de Canarias (PRCC)
Existen que sepamos dos propuestas de unidad comunista por Kanarias y hasta se republican entre ellos, pero lo que se dice avanzar en al menos solo un paso hacia la unidad, ni un milímetro, de discutir por ejemplo como se lucha por la unidad de los comunistas, menos, si desde lo cerrado, el capillismo, el amiguismo o públicamente, abiertamente llamando a participar a [email protected] los comunistas que quieran y a los primeros a los mejores luchadores/as [email protected], que como los de SaharAcción que hoy nos llenan de orgullo, combaten con toda su fuerza y honradez el genocidio de los saharauis y donde los haya, asi como las torturas, que por mínimas que sean, es conculcación de derechos humanos, los presos políticos por muchas piscinas con que cuenten en las cárceles, como la futura Macro cárcel de Juan Grande en Gran Canaria, son presos de conciencia, al igual que no se es medio libre, no se es medio luchador, solo de este o aquel conflicto lejano, por tanto integridad en la lucha y toda lucha refuerza la la lucha global.
Algún comunicadito exigiendo la libertad de los "pactista con el Estado" , curioso, los únicos dirigentes políticos encarcelados, como Otegui, sera por lo de colaboracionistas con el Estado que son encarcelado por ideas y mientras el resto mirándose el ombligo, dándose cachetitos unos a otros, mascullando lo luchadores que son desde el ordenadorcito "chic" último modelito, si es que además es el PC, que coincidencia como todos nosotros, prCc, pCpC y pcE.
Si les parece de interés, continúen leyendo en http://ElPobrecitoHablador.ES
Publicado por: Andrés León Almeida | 31/08/2010 en 06:58 p.m.