Cosas de Icod / El Digital de Canarias.- Por mucho que el concejal de esta área estratégica del Ayuntamiento icodense acuda a medios amigos donde le doran la píldora día sí y día no, lo cierto es que la organización interna de este departamento es un auténtico caos, un desastre de proporciones incalculables, dirigido por alguien que está a media jornada y que por las tardes se dedica a su despacho profesional como abogado, que no nos parece nada mal, aunque ya hay gente mosqueada con este hecho, por las visitas y por la gente que lo va a ver. Mientras tanto los técnicos están hasta los…de todo lo que pasa ahí dentro.
Tanto es así que para sacar trabajo, el Ayuntamiento tiene que contratar los servicios de profesionales exteriores y pagarles mediante facturas lo que la Oficina Técnica debería hacer con sus sueldos y sus propios trabajadores. Pero ni así sale nada y todo está parado en manos de uno de los franciscanos que rodean a Diego Afonso, un iluminado que está al frente de una de las corporaciones más importantes del Norte de la Isla. Y así les va. El invento de Juan José Acosta no ha cuajado y ahora Diego e Isabel se ven con este muerto administrativo, que no saben gestionar y no saben como manejar y por eso se dan este tipo de aberraciones que tienen al pueblo mosqueado, que ve como sus trámites se alargan y se alargan en el tiempo, Y mientras tanto el segundo franciscano se pone a negociar con esos propietarios del local que se va a usar como sede de la Gerencia, sin importarle un pimiento las formalidades y uno se pregunta si no tendrá que ver con esa oposición socialista amordazada por ese inmenso pasado que fue Cheo y sus jugadas urbanísticas.
Da pena ver al ex concejal de Urbanismo, José Alberto Ruiz Guzmán, quemándose con los guardias muertos, pero no diciendo esta boca es mía con lo que él conoce de sobra que está pasando dentro de la concejalía de este talibán nacionalista. En fin, cosas de Icod.
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