José Luis Valdés / Artículos de opinión.- Durante decenios, el periódico El Día, al igual que toda la prensa burguesa de este sufrido país, como La Provincia, Diario de Aviso, Canarias 7, etc…, han creado la confusión y la desunión entre los canarios de todas las islas, sin importarles mucho el desarraigo cultural en que pudieran caer la mayoría de los pobladores de este sufrido Archipiélago.
Ahora, cuando uno de sus correligionario, por los motivos que sea, ha roto con los esquemas informativos beneficiarios a sus intereses arribistas ostentado por la mayoría de las burguesías insularistas que se sirven del control económico y político con el apoyo y beneplácito del poder colonial del estado centralista de Madrid, fundamentado en la opresión del centro contra la periferia, estos paladines impuestos por el colonialismo y su sistema de manipulación antidemocrática vienen ahora, en plan victimista, apropiándose de la facultad de su representación en un parlamento hecho expresamente para la defensa de sus intereses, sustentado en base a la manipulación con el apoyo incondicional de los poderes fácticos, entre estos la prensa que tanto critican y condenan al infierno con el sarcasmo del mas hipócrita de los cinismos, a su buen amigo de toda la vida, El Día, como si el pueblo canario fuera tonto y desmemoriado para no acordarse a que intereses la prensa subvencionada han apoyado y apoyan permanentemente a lo largo de su historia.
Pensaba no escribir sobre este tema porque me da náusea de escuchar a los defensores del españolismo rancio y de una grande y libre peleándose, pero no puedo negar que estoy contento de que se echen los trastos entre ellos. Ya era hora que afloraran sus propias contradicciones. Si continúa así El Día, a la larga y hasta don Pepito (que siempre ha censurado los artículos con contenido de clase) acabarán cayendo simpáticos y con el tiempo, si mejora un poquito más y deja de escribir chorradas xenófobas e insularcitas, se ganará el aprecio de la mayoría de løs canariøs.
¡Independencia y Socialismo!
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