José I. Díaz * / Artículos de opinión.- Después de pasado el referendo del día 2 de diciembre, en vista de algunas opiniones benévolas, otras peyorativas en demasías contra el presidente Hugo Chávez, al que consideran y consideramos la gran mayoría, llevado por su protagonismo personal en los medios de comunicación, como el padre de dicho proyecto constitucional. He considerado sacar opiniones a la luz, deseando que las mismas sean las más neutrales posibles, y sirvan para iluminar la mente de aquellos que se consideran verdaderos patriotas, defensores de la democracia y los derechos humanos, que es lo mismo, que defender los derechos sociales que por gentilicio se merecen todos los ciudadanos venezolanos, y asimismo crear nuevas perspectivas unificadoras del conjunto de la sociedad, que vallan en beneficio de la revolución bolivariana, y por lo tanto, del propio pueblo venezolano, que es quien sufre y suele siempre pagar los platos rotos, dada la crisis social en que se encuentra estancado el proceso político, por culpa especifica de las ideologías políticas que cada partido maneja a su propio antojo, y en sus propios intereses sectarios.
Al presidente Hugo Chávez, siempre lo he considero una persona muy humana, patriota, valiente y amante de su terruño, con una dialéctica muy inteligente y coherente en la defensa del socialismo humanitario no tan solo en el ámbito venezolano, sino en el ámbito universal. Como podemos comprobar, Hugo Chávez significa muchísimo para todos los verdaderos revolucionarios, y es por lo tanto, un grave problema a nivel planetario para las multinacionales y gobiernos occidentales, ya que su revolución internacionalista anti-imperialista, al igual que la que represento en su día el coronel libio Muammar El Ghadafi con su Libro Verde y su Tercera Teoría Universal, al representar un grave peligro para la instalación del neocolonialismo y su globalización a escala mundial.
Como todos los humanos el presidente Hugo Chávez, posee sus propias debilidades, al carecer de elementos validos y consejeros capacitados que lo asesore, convirtiéndose sin darse cuenta en un caudillo, al que le rinde propio culto a la personalidad, sus simpatizantes y camarilla de aduladores más cercanos, creando sin darse cuenta, dos tipos de venezolanos; los bolivarianos y los opositores venezolanos, considerados sus enemigos, y que no son pocos, ya que para mayor INRI se les han unidos los yanquis y los españoles, por lo que ha surgido dos Venezuela; una de izquierda y otra de derecha, cuando solo debería existir una; la Venezuela de todos, con un presidente para todos los venezolanos, sin distinción de clases, credos políticos o ideologías. Un presidente que se siente a dialogar con los partidos opositores, y, llegar a un consenso de gobernabilidad con los mismos, para acabar y erradicar la corrupción, la miseria, la criminalidad y la delincuencia, que son y han sido los mas graves problemas que sufre la nación desde hace décadas. Ya que, sin la erradicación de dichas miserias humanas, nunca podrá existir una verdadera democracia en Venezuela, ni en ninguna otra parte del globo terráqueo.
Me gustaría mencionar mis puntos de vista, para la unificación de la sociedad venezolana, ya que sin dicha unidad nacional, será un plato fácil de engullir por el imperialismo occidental, ya que un líder carismático no puede representar a ninguna revolución, sino muchos lideres junto con el apoyo y solidaridad del propio pueblo. Dado que al carecer por cualquier circunstancia trágica de su líder, desaparece de inmediato la revolución. Es decir, que la revolución es un patrimonio del pueblo venezolano que es quien la sostiene, nunca de unas cuantas cabezas pensantes.
- El presidente Hugo Chávez como buen cristiano que dice que es, resulta injustificado ante Dios, que mantenga acuerdos con presidentes ateos y viejos regímenes dictatoriales, ya sea cubano, nortecoreano, español o norteamericano.
- Las ayudas que se envían a otras naciones extranjeras, deberían en primer lugar, utilizases para crear un mejor nivel social de las capas marginales de Venezuela, para así erradica de una vez por todas, la miseria y el alfabetismo, que es el cáncer social, de donde proviene la delincuencia y la criminalidad.
- El presidente de todos los venezolanos, debería sentarse a dialogar con los partidos opositores, tratando conjuntamente de acabar con todos los males que atañen a Venezuela, y lo que es más importante, no ver a la oposición como un enemigo común, sino como un aliado, aunque mantengan diferentes puntos de vista ideológicos.
- No tratar nunca de imitar a régimen caducos comunistas ni capitalistas, sino buscar una tercera vía; un socialismo humanitario, como el que predicaba nuestro Señor Jesucristo, que nada tiene que ver con la teoría del judío alemán Carlos Marx, que le esta dando alas algunos papanatas trasnochados
- Los venezolanos no necesitan importar héroes revolucionarios de ningún continente, ya los tienes con Simón Bolívar, Francisco Miranda etc., lo digo haciendo alusión a los comunistas de Fidel Castro o Ernesto Che Guevara.
- Crear asociaciones vecinales, donde los verdaderos revolucionarios expliquen y enseñen los postulados socio-culturales y económicos de la revolución bolivariana.
- Permitan en todos sus índices la libertad de expresión, tanto periodística, televisiva y digital. No permitiendo aquellas que promulguen la agitación social o rebeldía anti-democrática, sancionando con multas severas a las que traspasen dichas reglas sociales. Nunca se debería clausurar ningún medio de información.
- Ningún presidente democrático, debería perpetuarse en el poder, promoviendo un proyecto vitalicio, ya que seria anti-democrático. El pueblo será quien lo reelegirá nuevamente en referendo electoral, sí esta de acuerdo con su postulado.
- El presidente no debe cargar con la revolución sobre su espalda, para aligerar peso, debe darle mayor cuotas de responsabilidades a su ministro de relaciones exteriores, y al portavoz presidencial, quienes saldrán a menudo a la luz publicar a defender o anunciar medidas gubernamentales a la prensa. Así no recibirá el presidente Hugo Chávez, las criticas peyorativas de los vasallos internacionales a sueldo de Washington, como el propio fascista de Aznar.
- La mayoría de los países del mal llamado tercer mundo, entre ellos la colonia africana de las Canarias, tenemos demasiadas ilusiones y esperanza puesta en el presidente Hugo Chávez y su revolución bolivariana, razones por las cuales deseamos todo lo mejor para nuestro hermano pueblo venezolano, para que triunfe su revolución en todos los niveles sociales y democráticos, para que la misma nos sirva de ejemplo a seguir a todos los revolucionarios del mundo. Le deseo por lo tanto, al presidente Hugo Chávez, que no se deje amilanar por los gritos de sirena de los aduladores de turno, y que se rodee de verdaderos consejeros venezolanos con ideas claras sobre política nacional e internacional, y vera, como la próxima vez triunfara por mayoría su nueva propuesta constitucional. ¡Viva la revolución bolivariana y el hermano pueblo venezolano!.
* Presidente de la Asociación “Tierra Guanche”.
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