Agustín Mora Valle / Artículos de opinión.- Dentro de la irracional escalada belicista emprendida, comandada y financiada por la administración de George W. Bush a raíz de los –según algunos analistas políticos, entre ellos el francés Thierry Meyssan- AUTOATENTADOS del 11-S que únicamente sirvieron para justificar las guerras en las que nos ha metido EE.UU con la complacencia servil de otras naciones amigas o satélites, y para desatar la más pavorosa ola de atentados terroristas a escala mundial en la que los muertos (la mayoría civiles) se pueden contar por centenares de miles, el gobierno norteamericano sigue apretando la tuerca de la desestabilización mundial.
Amenaza el peor y más ignorante presidente de la historia de los EE.UU. con el riesgo de vernos abocados a una III Guerra Mundial (como si él ya no la hubiera iniciado) si Irán no entra por el aro de las órdenes e intereses norteamericanos (y no me refiero a los intereses del pueblo, que es quien pone los muertos), es decir, si Irán no se deja robar sus recursos energéticos y no facilita el control geoestratégico y político de esa codiciada región como son Oriente Medio y Oriente Próximo. Parece ser que el Presidente de Rusia, Putin, enseña cada vez más los dientes y es algo que asusta demasiado a este ex gobernador de Texas, merecedor de figurar en el libro de records Guinnes por los presos que fueron ejecutados en su Estado.
La palabra TERRORISMO es la preferida de Bush y, bajo esa palabra, este católico ferviente ha cometido y seguirá cometiendo todas las tropelías, masacres y genocidios que no tienen parangón desde que finalizase la II Guerra Mundial y se produjera aquel horrible crimen contra la humanidad que supuso el lanzamiento de la bomba atómica contra las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
Los civiles –mujeres, ancianos y niños- que allí murieron posiblemente también eran "terroristas" y el maestro de George W. Bush, el entonces Presidente Harry S. Truman, decidió dar un escarmiento ejemplar y exterminarlos.
Ahora este "Ángel Hacedor de Democracias Violentas", este amo del mundo que ni siquiera sabe donde quedan situadas las Islas Canarias ha vuelto, como decíamos antes, a apretar más la tuerca que hará aún más inseguro el mundo y la vida.
El pasado veinticinco de octubre (2007) este tipo y su gobierno de sátrapas (por algo se les conoce como "halcones", es decir, aves de "rapiña") declaró TERRORISTA al Ejército iraní y uno, que pensaba que no tenía más capacidad de asombro, he de reconocer que sí, que esta sigue existiendo y que además tendré que acostumbrarme a que esa capacidad sea infinita.
Y me pregunto… TERRORISTA el ejército iraní… ¿por qué? ¿Porque Irán no se ha doblegado a los intereses belicistas de EE.UU.? ¿Porque no quiere Irán ser objeto de expolio de sus recursos? ¿Por qué el pueblo iraní no quiere ser "occidentalizado" (qué pensarían los norteamericanos o Aznar, si llegasen los musulmanes y les obligaran a hacer cinco oraciones diarias, de rodillas y mirando a la Meca?) y lucha por su cultura, su religión, tradiciones, soberanía y dignidad, es decir, por sus valores como pueblo?
¿Quién se cree que es el "profeta" de la Casa Blanca para pretender que el mundo se ponga a sus pies como lo hicieron Aznar, Blair o Berlusconi de manera vergonzosa?
Si el Ejército iraní es considerado TERRORISTA, si el Gobierno iraní también…. bueno, vamos a recordar alguna de las "epopeyas heroicas" que protagonizó el Ejército norteamericano a lo largo de muchas, demasiadas décadas para escarnio propio y con diferentes gobiernos. Pero lo haremos en siguientes artículos porque la factoría de terrorismo internacional que significan los EE.UU. tiene demasiada producción de sangre y violaciones de cualquier legalidad en sus plantas del terror.
Pregunta idiota que se me ocurre esta semana… "Si Napoleón o Hitler vivieran… ¿le pedirían un autógrafo a Bush?
Agustín Mora
29 de octubre de 2007
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