Enseñanza / Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de Canarias-Intersindical Canaria (STEC-IC).- El STEC-IC considera que la Resolución aprobada por la Consejería de Educación, respecto al grave conflicto generado por la suspensión de las oposiciones de Educación Infantil, no aporta una solución real para los cientos de afectados por la negligente actuación de la Administración Educativa. Por el contrario, lejos de asumir su responsabilidad y apostar por una solución global para el conjunto de opositores, la Administración carga sobre los hombros de éstos las consecuencias de su manifiesta incapacidad para gestionar los asuntos públicos. No hay que olvidar que los opositores, con independencia de su situación inicial de aprobados o suspendidos, no tienen ninguna responsabilidad respecto del enorme fiasco generado, única y exclusivamente, por la mala gestión de los mandatarios, actuales y pasados, de la Consejería de Educación y del Gobierno de Canarias.
La nueva corrección de las pruebas escritas y la repetición de las pruebas orales, contando con el mismo número de plazas, tal como propone la Administración, tendrá como inmediata consecuencia el que un importante número de opositores, inicialmente aprobados y actualmente incorporados a su puesto de trabajo, pierdan el mismo. La judicialización del conflicto será inevitable, con el consiguiente riesgo de que se pueda producir una anulación completa del procedimiento selectivo, lo que multiplicaría el número de afectados y el daño al sistema público educativo.
tEl STEC-IC, en su día, propuso y sigue manteniendo, que había que ampliar las plazas, duplicando la oferta de empleo a cargo de futuras convocatorias, para dar salida a una situación anómala creada por la pérdida de control de la Consejería de Educación sobre el proceso.
Con esa solución, propuesta por el STEC-IC y asumida por las asambleas de afectados, se beneficiarían los interinos, que pasarían a absorber hasta unas posibles 400 plazas o más y quedarían plazas suficientes para dar salida a los afectados sin experiencia docente, unos 150 que están nombrados en sus puestos de trabajo desde principios de septiembre y que, con la solución adoptada por la Consejería, probablemente se vean en la calle a finales de diciembre.
Sin embargo, la cicatería del Gobierno de Canarias, y la escasa sensibilidad para solucionar los problemas que ellos mismos le crean a los ciudadanos, va a traer un largo proceso de recursos y juicios que pudiera terminar con las consecuencias ya señaladas, especialmente en aquellos tribunales en que se presentaron reclamaciones (Pedagogía Terapéutica y Educación Física, además de las referidas de Infantil). Aspectos estos que nadie desea, a no ser el propio Gobierno de Canarias que sigue empeñado en no aportar una solución satisfactoria al problema.
El STEC-IC reitera su apoyo a los Tribunales de Oposición, que actuaron siguiendo las directrices, de obligado cumplimiento, emitidas por la Comisión de Selección, que no estuvo sujeta a control alguno por la Consejería. Del mismo modo, vuelve a pedir responsabilidades, tanto al Director General de Personal, como a los anteriores Viceconsejero y Consejero de Educación y, en última instancia, al Sr. Ruano, Consejero responsable de la Función Pública Canaria.
Fernando Pellicer Melo
Miembro del Secretariado Nacional del STEC-IC
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