Foros ciudadanos / Foro Ciudadano Contra la Incineración de Residuos.- Las semanas anteriores a las elecciones del pasado 27 de mayo algunos ingenuos llegamos a pensar que, para esas fechas electorales, estarían listas determinadas obras que afectan a los que son, probablemente, los dos puntos más conflictivos de las carreteras de Tenerife.
Hasta cinco empresas distintas trabajaban mañana, tarde y noche (fines de semana incluidos) en la nueva rotonda del Padre Ancheta. Tres meses hace ya de eso. Y desde ese momento -después de que fuimos a votar- de allí se mandó a mudar todo el mundo y se acabaron los turnos de tarde y nocturnos y, por supuesto, los trabajos a destajo los sábados y domingos.
Y algunos, ingenuos también, pensábamos que lo peor de la obra ya había pasado y que sólo faltaba pintar unas rayas y sembrar unas palmeras, importadas lógicamente, para rematar el asunto. Pero el caso es que probablemente lo más jodido esté todavía por llegar, y llama poderosísimamente la atención que, unos días antes de empezar septiembre -con la consiguiente vuelta al trabajo de la mayoría de la gente- los tipos hayan realizado un nuevo corte de carril, seguramente el más peligroso que han hecho hasta el momento, que no sólo amenaza con prolongarse en el tiempo sino con matar gente.
Y el que la incorporación, regulada con un 'ceda el paso', que ha dejado esta gente para que la gente que viene de Las Esperanza, Geneto y la propia Trinidad puedan acceder a la TF-5 -dirección Santa Cruz- es sencillamente una ratonera peligrosísima que en pocos días ya ha dado varios disgustos y el criminal asunto amenaza con terminar en tragedia.
Y no digamos nada de la situación en la que se encuentra, precisamente en estos momentos, el punto más conflictivo de la TF-1, en el cruce de Añaza, donde han eliminado hasta el arcén donde se refugiaba la gente para acceder a la vía de enlace. Porque es que en esa autopista del sur alguien puso la señal de obras hace casi cuatro años y la cosa amenaza con prolongarse lo que no está en los escritos. Y a algunos nos parece, en nuestra ignorancia, que es precisamente en estos puntos conflictivos donde debieron comenzar a trabajar desde el principio para que la gente no se tenga que chupar, al mismo tiempo, la mal planificara obra y los atascos habituales de los puntos críticos. Una auténtica vergüenza que padecemos todos.
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