José Luis Valdés / Artículos de opinión.- El proceso de organización política, si bien comenzó en el 1980, la agitación en pro de la solidaridad del pueblo sueco con los independentistas canarios de izquierda, se inició en el 1975, al comienzo de la ‘Voz de Canarias Libre’, desde Argel. Al principio con reparto de octavillas contra el régimen franquista, entre los canarios y la población de habla hispana, así como el ‘libro blanco del MPAIAC’, traído por algunos marineros canarios que recalaban en el puerto de la ciudad de Göteborg, en donde existían las rivalidad de las dos asociaciones culturales de inmigrantes provenientes del Estado Español; una recibía ayuda del régimen y de la Iglesia católica, y la otra republicana de nombre García Lorca. La mayoría de los canarios iban tanto a una como a la otra y algunos frecuentábamos los Clubs Africanos y Latinoamericanos. El Club Africano era visitado mayormente por caboverdianos, con los que hicimos muy buenas migas.
Quitando un reducido grupo de trabajadores canarios que estábamos vinculados a la LO (Sindicato Sueco) o al Partido Socialista Sueco, la mayoría no estábamos organizados en partidos políticos, aunque simpatizábamos con las organizaciones de la izquierdas suecas.
Para los que no conocen Suecia quiero hacer un pequeño resumen histórico. Los suecos, igual que los canarios, hasta finales del año1800, eran un pueblo agrícola y pobre, lo que dio lugar que tuviesen que emigrar a América, en particular a USA.
Hoy día en Suecia, como en Canarias, la situación se ha invertido, y de ser pueblos de de emigrantes se han convertido en tierra de inmigrantes.
En Suecia, de unos nueve millones de habitantes, más de un millón son extranjeros o personas que, aun siendo ciudadanos suecos o nacidas en Suecia, mantienen sus vínculos al país de origen. De ellos más de medio millón tienen la nacionalidad sueca. Como decía en mi anterior artículo, a principios del 1980 un tercio de los cerca de cuatro mil ciudadanos proveniente del Estado Español eran canarios.
La política sueca sobre inmigración está regulada por la Ley , y sólo puedes ir a trabajar a Suecia si tienes contrato de trabajo, eres miembro de la UE o tienes razones para abandonar tu país y considerarte refugiado político.
El Estado Sueco garantiza que todos los inmigrantes tengan las mismas posibilidades, derechos y obligaciones que los suecos.
Los suecos consideran ventajosa la mano de obra inmigrante, ya que gracias a ésta la economía sueca se ha desarrollado enormemente, pero a la vez tienen un cierto grado de desconfianza hacia los extranjeros, en el caso entre suecos y canarios no se nota tanto por la facilidad que tenemos los canarios en integrarnos en otros pueblos y culturas, también por el conocimiento que los suecos tienen de Canarias y porque los canarios nos hemos mezclado con los suecos. Como dato anecdótico diré, que al poco tiempo que un canario vive en Suecia aprende el sueco, cosa que no sucede con inmigrantes de otras nacionalidades, el motivo, entiendo yo, que es nuestra forma de ser abierta hacia otras culturas.
Todos los inmigrantes tienen derecho a disponer de un intérprete para solucionar cualquier tipo de situación si este no domina correctamente el sueco. Existe un periódico semanal informativo en varios idiomas entre ellos en español, publicado por la oficina de inmigración, al cual pueden suscribirse cualquier ciudadano. También la radio y televisión transmiten, a unas horas determinadas y días, programas en las lenguas de los grupos mayoritarios residentes.
El sindicato de la LO es la organización de trabajadores más grande, con cerca de dos millones de afiliados, y esta formado por mas de 25 uniones sindicales. La más grande es el sindicato del metal, con más de medio millón de afiliados.
Continuando con la actividad de los canarios en Suecia, además de los boletines políticos editados por los independentistas canarios, la Asociación Cultural Guanche, que mantenía su autonomía de no estar vinculada a ningún partido, también editaba sus propios boletines internos entre sus afiliados, informando de los derechos de los inmigrantes y de los acontecimientos en Canarias. De estos boletines salieron más de catorce números.
Alguna de las acciones curiosas y sonadas en la cual participamos los canarios independentistas de izquierdas y comunistas, a principio de los ochentas, fue en la marcha de la Paz y el recibimiento que le dimos en la Casa del Pueblo de Stockholm al gran escritor Gabriel García Márquez, cuando vino a recoger el premio novel de literatura.
Continuará...
¡Independencia y Socialismo!
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